Ophiusa de la Bodega Cap de Barbaria es un vino distinto, un vino de autor. Un vino que te transporta a Formentera, a su clima y a su paisaje mediterráneo, lleno de sol y mar. Y aunque esta isla pueda parecer un lugar exótico como origen de un vino, los propios matices de este coupage de Cabernet, Merlot, Monastrell y Fogoneu lo sitúan si ninguna duda en un «terroir» árido y salino propio del micro-clima mediterráneo donde esta ubicada la viña de «Can Andreuet», en el Cap de Barbaria, que es donde se cultivan todas las variedades que componen este vino.
La selección de las uvas que lo van a componer se hace de manera manual y metódica, uva a uva, con esmero y cuidado. Luego cada variedad de uva se envejece por separado en barricas de roble durante un periodo de tiempo que puede oscilar entre los 6 y los 10 meses. Por fin se realiza el coupage en las proporciones que la añada y el final deseado señalen como las mas idóneas.
La Monastrell que requiere de climas cálidos para ofrecer su máxima potencia, tanto en graduación como en taninos y que se asocia al Cabernet Sauvignon y al Merlot para aportar ese toque «herbáceo» tan característico de esta uva. La Fogoneu, una variedad tinta autóctona de las Islas Baleares a la que se considera emparentada con la uva Gamay con la que se elabora el vino Beaujolais.
Ophiusa 2013 es un vino joven y afrancesado que evoluciona rápidamente una vez abierto. Tiene un precioso color rojo rubí (sanguíneo) de una gran brillantez. En nariz no se muestra especialmente expresivo, como podía hacer suponer su coupage, pero las notas a especias y a fruta roja se notan con el tiempo de oxigenación. Ahora bien, es en boca donde este vino se hace realmente expresivo. Al principio es ácido y fresco, «pica» en la lengua y sus taninos se muestran afinados, muy sutiles.
Pero es su final salino y herbáceo el que hace realmente distinto a este vino. Dura y dura y dura. Parece como si no se fuera a terminar, como si te hubieras bebido un vaso del mar de Formentera y el amargor del Mediterráneo se te hubiera enganchado en la base de la lengua. Con el paso del tiempo va dulcificando su paladar y aparecen notas más golosas, pero siempre mantiene un final único.
Para nosotros ha sido un auténtico descubrimiento. Un vino excepcional y exótico que demuestra como se pueden aprovechar los suelos y los climas para dar personalidad a los vinos. Descubrirlo os costará alrededor de 16 €.
Salud !!
Baco y Boca 